Infogeneral Diario La Nación: - 28 enero, 2014 | 12:00 AM
El domingo comienza a regir el decreto sobre el uso del chaleco de motorizado
A partir del próximo domingo, dos de febrero, comienza a regir en el Táchira la obligatoriedad que tienen los motorizados del uso del chaleco con los respectivos números de placa de su vehículo, reflectivos, en la espalda. Quien incumpla el decreto 511 del Ejecutivo Regional será objeto de retención de la moto durante cuarenta y ocho horas. La Ley de Transporte, no obstante, establece una sanción de entre 3 a 10 unidades tributarias (107 es el valor de cada una), a quien la transgreda.
La primera prórroga para la aplicación del decreto la realizaron del primero de diciembre al primero de enero; la segunda, del primero de enero al primero de febrero. De manera que “todo el mundo, tanto mototaxistas (le corresponde el de color naranja), como particulares (civiles, paseo o mensajeros), el de color verde oliva; funcionarios (judicial y gobierno) el azul rey; y el personal de seguridad (policías, guardias…) de color amarillo, tienen que portar el chaleco”, agregó.
Jaime Otero Silva, subdirector de Protección Civil en el estado Táchira, informó que el dos comienza a regir la medida establecida en el decreto 511, y esta vez sin prórroga. Indicó que quienes incumplan la normativa les será retenida la moto durante cuarenta y ocho horas.
Buitrago opinó que la medida se ve, dependiendo del punto de vista. “Yo, como ente de seguridad y también como ciudadano, pienso que es una manera de quien conduzca una moto se distinga; esa una medida de seguridad es para tener un control, porque los chalecos tienen la placa identificadora en letra grande y al momento de una colisión, porque a veces se dan a la fuga, o algún sicariato, se puede distinguir quién es, o cualquier otra situación”, dijo.
Mientras la medida es aplaudida por una buena parte de la población, y aunque desde noviembre debían llevar los chalecos reglamentarios, los motorizados dicen estar sufriendo con la compra.
Omar Espinel, motorizado particular, pidió que regularan los precios de los mismos. “No puede ser que un chaleco, que no pasaba de 250 bolívares, ahorita de 600 y 700 no se baja; yo, gracias a Dios, uno en el trabajo tiene su rebusque, pero dígame cómo va a hacer quien tiene un sueldo mínimo, que no tiene a veces ni con qué hacer mercado. Y dígame los cascos, que valían 700 y 800 bolívares y ahora no se bajan de mil 500. El Gobierno debe revisar esos precios”.
Jesús García, vendedor, se defendió de la enuncia e Espinel, quien le acababa de comprar el chaleco, con base en la calidad de la prenda y que es nuevo el producto y de mejor presentación, además que tienen que aguantar las “peticiones” de algunos funcionarios que incluso les fían pero no pagan.
Quejándose de que por la Feria las ventas de la prenda se vieron opacadas, insistió en el acabado. “Esta chaqueta, por ejemplo, representa, y aparte de la presentación, está el tipo de tela, que además se puede desarmar en la parte de la manga; la de doble faz, que tiene el color verde y el naranja, y se pone de acuerdo a si va de particular o como mototaxista, es dos en uno, pero está el más económico, mire el acabado, es una prenda que no lo hace quedar mal, y vale 600, al igual que este que es más sencillo, el de malla solamente lo tenemos en naranja y lo vendemos porque lo necesitan para los parrilleros de los mototaxis.
Germán Pinto, vendedor, argumentó que en noviembre, cuando empezaron a venderlos, nadie compró, y fueron aumentando los precios, aunque no existían ni las chaquetas ni tampoco los chalecos de doble faz, sino solamente los sencillos.
La realidad es que se observa en la ciudad un sinnúmero de ventas de chalecos que, según personas como Gustavo Sánchez, mototaxista, debían redundar en la reducción del precio, “pero por el contrario, cada día que pasa aumenta el costo de los mismos, y es una situación que el ente gubernamental respectivo debería controlar”.
Marina Sandoval Villamizar
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